Zara Tindall, la hija menor de la princesa Ana de Inglaterra, confesó que tuvo “suerte” de que su abuela, la reina Isabel II, no les haya dado a ella y a su hermano, Peter, un título real, lo que les permitió seguir vidas independientes de la realeza.
Zara Tindall, sobrina del rey Carlos III, y su esposo el ex rugbier Mike Tindall, fueron entrevistados por el exjugador de rugby Rob Burrow en su podcast Total Sport, donde se les preguntó qué consejo se darían a ellos mismos cuando tuvieran siete años.
Aunque al principio se sintió intimidada por la pregunta, Zara pasó a hablar de su papel como miembro de la familia real británica y de lo feliz que está de que su madre no la obligara a ella y a su hermano a trabajar como miembros de la monarquía.
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“Tuve mucha suerte de que mi madre no nos diera ningún título”, dijo Zara Tindall, hija de la princesa Ana
“Desde mi punto de vista, obviamente tuve mucha suerte de que mi madre no nos diera ningún título, así que realmente la felicito por eso”, dijo. “Tuvimos mucha suerte de poder hacerlo un poco a nuestra manera”.
“Mi familia también tiene una gran ética de trabajo que espero que me hayan inculcado y que todavía tenga hasta el día de hoy”, reconoció Zara, de 42 años. “Con suerte, podemos transmitirlo a nuestros hijos”.
“Ahora, a mi hermano y a mis primos les encanta volver y hacer las mismas cosas y espero que nuestros hijos tengan las mismas experiencias que nosotros tuvimos cuando éramos pequeños”, dijo Zara. “Realmente no aprecias eso hasta que eres mayor y tienes hijos”.
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La princesa Ana rechazó que sus hijos Zara y Peter tuvieran títulos de la realeza
Cuando la princesa Ana tuvo a su primer hijo, Peter, en 1977, decidió junto con su entonces esposo, el capitán Mark Philips, que no querían darles a sus hijos títulos ofrecidos por Isabel II, en un intento por brindarles una educación lo más normal posible.
Casi dos décadas antes, la reina Isabel le había otorgado a su cuñado Tony Armstrong-Jones, los títulos hereditarios de Conde de Snowdon y Vizconde Linley cuando se casó con la princesa Margarita. El título fue heredado por su hijo mayor, Lord David.
Ya a principios del siglo XX, el rey Eduardo VII convirtió en princesas del Reino Unido a las dos hijas de su hija mayor, la princesa Luisa (que ostentaba, al igual que Ana, el título de “Princesa Real”) en un intento de igualar su status frente a sus primos hermanos.
Pero la princesa Ana y Mark Phillips prefirieron que Peter y Zara permanecieran alejados de la realeza, en la medida de lo posible, y solo recibieron el trato oficial de cortesía de “Master” Peter y “Miss” Zara. Ellos, no obstante, conservan su derecho al trono, al igual que sus hijos.
Zara, una consumada ecuestre, ganó una medalla de plata como miembro del equipo de competición completa de Gran Bretaña en los Juegos Olímpicos de Londres 2012. En 2011 contrajo matrimonio con Mike Tindall, con quien tuvo tres hijos: Mia, en 2014, Lena en 2018 y Lucas en 2021.
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